AGOSTO 2010

Perdices.
Paciencia, sol, pereza,verbenas. Amarillo.
El cesped del campo es amable, tan amable que a los mosquitos sin invitarlos se han instalado allí, con nosotros.
Mis piernas parecen la bata de cola de Lola, y las de Juancar y Jesús son la foto de la carne tras la explosión de una bomba de racimo. Su madre pensó que venía de una batalla.
Los racimos de Rueda maduran y piensan en nuestras bocas mientras vamos a Medina. Saben que en Mayo nos embriagarán convertidas en verdejo, el mejor verdejo del mundo.
Verdejo para celebrar lo que queremos conseguir.Será en Mayo.
Ahora nos toca sudar cuando podíamos comernos una manzana entre los viñedos.
Ahora es el tiempo del esfuerzo grande.Es el tiempo de fabricar cañones o tirachinas para la pelea.
Sabemos que seremos fuertes, que juntando hilos se hace una maroma.
Jugamos al fútbol, a lo que quieren jugar los viejos pero ya no pueden, a lo que quieren jugar los niños pero aún no saben. Jugamos al fútbol porque nos gusta.
El territorio, el tiempo, las normas, el rival, el juez, el objetivo.Como en la vida, con los míos al fin del mundo.

Mosquitos...¿Por qué no vais a picarle en la cabeza al calvo?,o mejor, en los huevos.